Los elementos de fijación Translink se componen de diferentes tipos y modelos, que abarcan dispositivos internos, anillos externos o retráctiles y cubos de compresión.
Los elementos de fijación se pueden agrupar en dos tipos, internos y externos. Mientras que los internos se colocan entre el eje y el cubo creando una fuerza de fricción de compresión interna y externa, los discos externos, conocidos como discos de contracción, se colocan fuera del cubo y ejercen una fuerza de fricción de compresión sobre el eje.
Hay muchas aplicaciones en las que se pueden aplicar los elementos de fijación, como engranajes, placas, ruedas dentadas, todo tipo de cubos, levas, poleas y otros elementos de transmisión giratorios. Los elementos de fijación Translink también se pueden utilizar también como acoplamiento rígido.
Translink cuenta con una de las gamas de elementos de fijación más completas del mercado, lo que asegura satisfacer las expectativas y necesidades de nuestros clientes.
Todos los elementos de fijación Translink se fabrican en centros de producción certificados ISO 9001, y de acuerdo con las más exigentes calidades. Consulte las especificaciones técnicas y modelos disponibles en nuestro catálogo.